El recién anunciado Cybertruck de Tesla se ha convertido en uno de los productos más polarizadores de la empresa -y estamos hablando de Tesla, señores- y en estos primeros días este concepto no ha parado de generar un gran debate sobre el futuro de los la industria de la automoción en general y de las pickups en particular.
De hecho Tesla ya sacudió las bases de esa industria cuando introdujo su primer coche eléctrico, pero ahora lo ha hecho -quizás en menor medida- al presentar un vehículo que rompe con las reglas establecidas y lo hace con una propuesta que aún así ha tenido una acogida fantástica por parte de los usuarios. O al menos eso parece a juzgar por las reservas del Cybertruck en los primeros días.
Para hablar de esta propuesta de Elon Musk os acompañamos Josep Camós (@josepcamos), director de Motorpasión, y un servidor, Javier Pastor (@javipas), editor en Xataka. La producción corre a cargo de Santi Araújo (@santiaraujo), editor en GenBeta y que además presenta, produce y dirige este y otros podcasts de Webedia España.
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Si algo sabe hacer Musk, es lanzar un nuevo producto
El Tesla Cybertruck ha generado una expectación asombrosa, y lo ha hecho en buena parte gracias tanto a su peculiar diseño -o lo amas o lo odias- como a esos mensajes que Elon Musk, mago del marketing en redes sociales, ha ido lanzando en los primeros días de su presentación.
Precisamente esos mensajes han tenido casi más repercusión que el coche en sí: sus ventanas con cristal resistente acabaron convirtiéndose en el momento más embarazoso de la presentación al romperse cuando no debían hacerlo, pero también generó mucha polémica el reto que Musk intentó plantearle a la Ford F-150, la camioneta más vendida en toda la historia en ese formato al que ahora Tesla ataca con la Cybertruck. Ford, por cierto, declinó la oferta.