Las marcas de coches tienen un problema con el software: ciberseguridad, parches y soporte de sistemas por más de 15 años
El trazado de la carretera es regular y la circulación fluida. Tienes conectado el control de crucero y avanzas relajado a la velocidad límite permitida para la vía. De repente, a trescientos metros de la próxima curva, el coche comienza a acelerar solo. Confundido, tardas dos segundos en reaccionar y pisar el freno para pasar al control manual, tiempo suficiente para que entres en el tramo curvo demasiado rápido, pierdas el control y tengas un accidente que puede resultar mortal.